Involución o transformación

5ª JORNADA. DEBATE SOBRE "¿INVOLUCIÓN O REFORMULACIÓN TRANSFORMADORA?"

"La historia se construye sobre las condiciones sociales anteriores, no por voluntad omnipotente"

La 5ª jornada del ciclo "¿Involución o reformulación transformadora? Dilema para el nuevo rumbo de la izquierda uruguaya" se llevó a cabo el viernes 29 de octubre. Estas charlas son organizadas por el grupo reunido en la página web Elsocialismoesposible.org y auspiciadas por el diario LA REPUBLICA y por la Fundación Vivián Trías.

Por Víctor Carrato.

Panel. El doctor Manuel Laguarda, el periodista Marcelo Pereira y el sociólogo Alvaro Portillo.

Manuel Laguarda, médico psiquiatra, dirigente nacional y secretario de relaciones internacionales del Partido Socialista (PS) expresó que la izquierda se ha acercado más a sus metas, sin embargo en el debate ideológico dijo que se constata que la izquierda lo ha dejado de lado, "en parte por la urgencias del día a día, pero también nos ha afectado la desorientación ideológica , la ofensiva mundial del pensamiento conservador y las secuelas del fracaso del socialismo real que nunca terminamos de elaborar y asumir en profundidad".

Con respecto a la actual fase del capitalismo Laguarda afirmó que nos encontramos con dos fenómenos destacables como la crisis del mundo capitalista y la emergencia de un mundo multipolar. Sintetizó esta fase del capitalismo como una tercera etapa caracterizada por el neoliberalismo, la globalización, la financiarización de la economía donde existen economías como la de Estados Unidos que consume y se endeuda y economías como la de China que producen y son acreedoras.

Esta tercera etapa del capitalismo, según Laguarda no implica negar la existencia del imperialismo ni del papel de los estados nacionales y sus agrupamientos. Según Laguarda después del crecimiento del capitalismo a partir de la primera guerra mundial se estanca a partir de los años 60 y recordó la explicación de Marx como un fenómeno de superproducción que aparece cuando se agota el gasto social y militar a lo cual se le agregó, a mediados de la década de los 70, la crisis petrolera. Señaló que esta crisis el capitalismo la supera por la revolución científico tecnológica, el desarrollo de la informática, las biotecnologías, la robotización, el pasaje al posfordismo en las empresas y por otro lado, la aceleración de la globalización, lo que implica la recolocación de los procesos productivos, la desindustrialización de las áreas centrales y la industrialización en otras regiones, especialmente Asia.

La decadencia de los EEUU-económica, no necesariamente política o militar-no significa que las relaciones capitalistas de producción estén en colapso, dijo Laguarda.

"Para esto es necesario forjar una alternativa capaz de superar al capitalismo a nivel nacional y a nivel mundial. Esta situación-peligrosa e inestable-, puede durar mucho tiempo hasta que surja una alternativa sistémica", añadió.

"La crisis de la hegemonía de EEUU, sin que exista un sustituto hegemónico, se da junto con el multilateralismo, la formación de bloques regionales y de alianzas cruzadas como el BRIC. En ese contexto se dan fenómenos positivos, como cierto resurgimiento del pensamiento crítico o la presencia de varios gobiernos progresistas en nuestra región. Todo esto alienta a retomar la reflexión sobre el socialismo", expresó el ex secretario general del PS.

En el contexto de la globalización, como desarrollo de las fuerzas productivas a escala planetaria, el socialismo requiere de la dimensión democrática a escala internacional.

En tal sentido, los procesos nacionales deberán confluir a escala regional y mas allá en el diseño de un mundo y una globalización, conducida con otra lógica que no será la del capitalismo, en un internacionalismo de nuevo tipo.

"El debate debe situarse en la confluencia de estas dinámicas múltiples y complejas.

La experiencia histórica demuestra que sin democracia no hay socialismo y al mismo tiempo la democracia implica la posible alternancia con opciones no socialistas, dijo Laguarda.

Reafirmó que "los socialistas uruguayos llamamos Democracia sobre nuevas bases (DSNB) a la vía democrática para la construcción del socialismo en nuestro país.

Implica desarrollar el poder alternativo de los sectores subalternos desde el estado y desde la sociedad. Acceder y mantener el gobierno por medios democráticos y desarrollar una nueva hegemonía en el sentido gramsciano en la sociedad civil.

Sustancialmente, se trata de socializar el estado o sociedad política y de politizar la sociedad civil. Socializar el Estado es hacerlo cada vez mas democrático, acercando y ampliando las opciones democráticas a la gente. Es la descentralización, los gobiernos locales electivos y también el desarrollo de la democracia directa y participativa acercando gobernantes y gobernados.

A la pregunta inicial, disparadora para estos debates, Laguarda dijo que "los procesos no son lineales, ni en blanco o negro. La historia se construye sobre las condiciones sociales anteriores, no por una voluntad omnipotente".

Subrayó que "en nuestro caso, la suma de complejos procesos nacionales, regionales y mundiales, en lo político, económico e ideológico-cultural. Claro, que esto no puede invocarse como justificación para nuestras fallas o errores, que también los tenemos.

Pero yo hago un balance positivo: mantuvimos la identidad de izquierda, la mayoría de la población nos reitero su adhesión, tenemos el gobierno y podemos interpelar a la sociedad organizada. No tenemos cheques en blanco".

Para el dirigente socialista. el desafío es como consolidar y aumentar la base social y avanzar al mismo tiempo. Una síntesis difícil, para la cual, dijo que no hay recetas y que en cada momento hay que evaluar, en cual de los dos elementos de ese par dialéctico hay que apoyarse.

Sobre la interrogante que le da el nombre a este grupo y a esta inquietud: el socialismo es posible?, Laguarda refirió que en 1976, Bobbio planteó la pregunta crudamente. "Si la vía no democrática representada por la URSS no conduce al socialismo, es posible que la otra vía, la que plantea la democracia y la posibilidad de la alternancia de partidos nos lleve al mismo?" Respondió que "también es una pregunta abierta. No tenemos certezas. No podemos apelar al fallo ineluctable de la historia. Pero se nos va la vida de la especie y del planeta en la respuesta".

Para concluir, Laguarda expresó que "en el momento de concluir este trabajo me viene a la memoria la imagen del ángel de la historia que describía Walter Benjamin en el decenio trágico de 1930: el ángel vuelto de espaldas al futuro, contemplando los residuos del pasado, es empujado por una fuerza irrefrenable,"una tempestad que sopla desde el Paraíso".Y Benjamin reflexiona y se dice: "esta tempestad es lo que llamamos Progreso".

También hicieron uso de la palabra el periodista y director de La Diaria, Marcelo Pereira y el sociólogo Alvaro Portillo, ex director del Departamento 20 de la cancillería.

Fuente http://www.larepublica.com.uy